PROVIDENCE — A pesar de tener que sortear desafíos financieros sin precedentes presentados durante el primer y segundo año de la pandemia del COVID-19, la Diócesis de Providence logró cerrar el año fiscal 2021 con una base financiera muy sólida, según los estados financieros diocesanos anuales auditados de su Fondo General, Fondo de Caridades Católica, incluida su campaña anual, y Cementerios Católicos.
Como se describe en el informe, los activos diocesanos combinados, que incluyen efectivo, cuentas por cobrar pendientes e inversiones de la Fundación Católica de RI, fondos de pensión para sacerdotes y laicos diocesanos, fondo médico y el Fondo de Préstamo Inter parroquial, aumentaron $ 68.83 millones, un aumento del 27% sobre el año fiscal anterior, por un total de $324 millones.
El floreciente repunte económico de la nación durante este tiempo abrió la puerta a un mercado bursátil alcista, que impulsó el valor de las inversiones diocesanas combinadas en $54 millones, produciendo un retorno de poco más del 30%.
El obispo Thomas J. Tobin, en una carta que acompaña a la publicación del informe, dijo que estaba complacido de que, a pesar de los muchos desafíos imprevistos que presentó el año, la Diócesis de Providence pudo concluir su año fiscal con un resultado positivo.
“Aprovecho esta oportunidad para extender mi más sincero agradecimiento a toda nuestra familia diocesana por su maravillosa generosidad, con un reconocimiento especial a quienes han apoyado nuestra Campaña Capital diocesana y nuestra Campaña Anual de Caridades Católica”.
“Estoy agradecido con los muchos que han regresado a la participación regular en la Misa y animo a todos los que puedan unirse a nosotros. También estoy agradecido con todos los que ejercen funciones de corresponsabilidad en nuestra diócesis”, dijo el obispo Tobin.
El director financiero diocesano, Michael F. Sabatino, dijo que, durante un año diferente a cualquier otro en varias generaciones, la pandemia presentó un curso difícil para que la diócesis navegara en el funcionamiento de sus operaciones y continuara con su alcance caritativo a los necesitados.
“Estoy muy animado con los resultados, pero más especialmente con nuestras parroquias, escuelas y agencias durante un año muy exitoso en lo que han sido tiempos muy difíciles”, dijo Sabatino,
“Es un tributo a nuestros párrocos, nuestros rectores, nuestros directores y muy especialmente a nuestros fieles feligreses”.
Aunque las oficinas de la Administración Central de la diócesis habían reabierto con cautela sus operaciones al comienzo del año fiscal, las parroquias, escuelas y agencias regresaron en julio del 2020 aun luchando por encontrar formas de brindar los niveles más altos de ministerio y servicio posibles respetando los protocolos de salud obligatorios.
Otro informe oficial de resultado positivo de los crecientes rendimientos de las inversiones es que tanto el Fondo de Pensiones para Laicos diocesano como el Fondo de Pensiones para el Clero lograron un progreso positivo en el año fiscal 2021 hacia el objetivo de lograr el estado de capitalización total.
Los funcionarios dicen que lo más grande que enfrentan involucra la operación de los hogares de ancianos diocesanos y las instalaciones de vivienda asistida, incluida la Residencia St. Antoine y la Villa en St. Antoine, así como St. Clare-Newport.
Aunque todas las instalaciones registran más del 90% de ocupación, las dificultades de personal, el COVID-19 y los reembolsos médicos continúan obstaculizando las operaciones, algo común en otras instalaciones de atención médica en todo el país en este momento.
En el punto medio de la Campaña Anual de Caridades Católica de 2022, la Diócesis de Providence ha recibido $4,315,462 en donaciones y promesas únicas, alcanzando el 63% de su meta.
