En el mes de Noviembre en los Estados Unidos celebramos el Día de Acción de Gracias, y quisiera escribir una columna sobre las innumerables veces en que Dios ha obrado en mí y en mi familia a pesar de ser un pecador, y haberme equivocado muchas veces pero Dios es Fiel y no nos abandona si nos acercamos a él arrepentidos y con un corazón sincero.
Primeramente quisiera dar a Gracias por poner ángeles en mi camino cuando a mis veinte años me preparaba para venir a este bello país.
Recuerdo cuando estaba en la embajada de los Estados Unidos en Buenos Aires, Argentina en 1990 y cómo a muchas personas que estaban en frente mío y con mucha solvencia, les negaron la visa. Yo llevaba muy poco de papeles y sin embargo Dios permitió que los agentes de inmigración me dieran luz verde para venir a éste país.
Un par de meses después regrese a Buenos Aires en un viaje en autobús desde Córdoba donde estaba estudiando con dos maletas bien grandes y solo $20 en el bolsillo. Al salir de la terminal de autobús, necesitaba hacer un viaje de más de media hora para llegar al aeropuerto. Le pregunté al primer taxista cuanto salía el viaje y me dijo $50. Pensé que me vieron cara de muchacho y me estaban tomando el pelo. Le pregunto al segundo taxista cuanto me cuesta y me dijo “$50 dólares”. Entonces me comenzó a entrar un pánico pues solo llevaba $20 en el bolsillo.
Hice una oración y le pedí a Dios que me ayude y él plantó una idea en mi mente. Hablé con el tercer taxista y le dije “Mire necesito reunirme con mi familia y tengo que llegar al aeropuerto solo tengo $20, un reloj y unas zapatillas Adidas nuevas en su caja, ¿me ayuda?”. El señor me miró y tal vez vió mi cara de pánico y me dijo “Vamos hijo”.
Al llegar al aeropuerto todavía me encontré que necesitaba pagar un impuesto de $2 para entrar al avión. Una pareja que nunca más volví a ver fueron mis ángeles que me rescataron de quedarme sin viajar.
Dios tenía un plan para mí.
Un tiempo después ya casado y con 2 hijos cuando todavía estaba estudiando en el Providence College, mi esposa Becky y yo compramos nuestra casa. No teníamos ahorros y de alguna manera todas las cosas se facilitaron para la compra. Cuando nos movimos nos dimos cuenta que la casa no tenía cocina ni heladera en el apartamento del primer piso, y tampoco secadora o lavadora. Necesitábamos $1000 para comprar lo que necesitábamos de una tienda de electrodomésticos usados. Para nuestra sorpresa y bendición esa semana recibimos un cheque del abuelo de mi esposa Henry, que en paz descanse. El monto del cheque era “$1000”, justo lo que necesitábamos.
Recientemente, nuestro párroco el Padre James organizó un “curso de Paz financiera”, para salir de las deudas y planificar su futuro financiero. Con mi esposa nos dimos cuenta que habíamos acumulado demasiadas deudas y no estábamos ahorrando para nuestra vejez.
Nos pusimos mano a la obra con los 7 pasos que aprendimos. Ahorrar un fondo de emergencia de $1000. Hacer un presupuesto mensual y documentar todos los ingresos y gastos. Tercero enumerar todas las deudas de la más pequeña a la más alta y comenzar a pagarlas agresivamente en ese orden.
Pues eso hicimos y ahorramos el fondo de emergencia, pagamos dos tarjetas y nos quedaban dos con un monto de cerca de cinco mil dólares. Pues luego recibí una llamada de mi abogado para informarme que había conseguido un acuerdo con la compañía de seguro por un accidente que tuve el año pasado. La verdad que no esperaba recibir mucho pero para mi sorpresa el monto me permitió pagar casi completamente las dos tarjetas que me quedaban. Una vez más Dios proveyendo por nuestras necesidades. Podría escribir un libro con muchas historias más como éstas.
Finalmente me queda agradecer a Dios por la esposa que puso en mi camino y 7 bellos y talentosos hijos. Dios no me ha dado todo lo que deseo o quiero, pero siempre ha dado lo que necesito y mucho más. Me gustaría escuchar y compartir algunas historias de como Dios ha trabajado en tu vida y tal vez podemos escribir juntos un librito de Diosidencias puedes mandarlas a scuellar@thericatholioc.com
¡Feliz Día de Acción de Gracias!